martes, 9 de abril de 2013

SEMANA DEL 8 DE ABRIL 2013

CÁNTICO 123
"NUESTROS PASTORES SON UN REGALO DE DIOS"

  • Textos del Estudio Bíblico de Congregación (jr cap. 7 párrs. 14-20.) (30 minutos)
Párrafo 14
(Jeremías 31:25) Porque ciertamente saturaré al alma cansada, y ciertamente llenaré a toda alma que languidece”.
(Jeremías 1:18, 19) Pero en cuanto a mí, aquí he hecho de ti hoy una ciudad fortificada y una columna de hierro y muros de cobre contra todo el país, para con los reyes de Judá, para con sus príncipes, para con sus sacerdotes y para con la gente de la tierra. 19 Y de seguro pelearán contra ti, pero no prevalecerán contra ti, porque: ‘Yo estoy contigo —es la expresión de Jehová— para librarte’”.
(Jeremías 16:19) Oh Jehová mi fuerza y mi plaza fuerte, y mi lugar adonde huir en el día de angustia, a ti vendrán las naciones mismas desde los cabos de la tierra, y dirán: “Realmente nuestros antepasados llegaron a poseer pura falsedad, vanidad y cosas en las que no había nada provechoso”.
Párrafo 15
(Proverbios 25:11) Como manzanas de oro en entalladuras de plata es una palabra hablada al tiempo apropiado para ella.
Párrafo 16
(Jeremías 15:15, 16) Tú mismo has sabido. Oh Jehová, acuérdate de mí y dirígeme tu atención y véngame de mis perseguidores. En tu tardanza para la cólera, no me quites. Nota que he soportado oprobio por causa de ti mismo. 16 Fueron halladas tus palabras, y procedí a comerlas; y tu palabra llega a ser para mí el alborozo y el regocijo de mi corazón; porque tu nombre ha sido llamado sobre mí, oh Jehová Dios de los ejércitos.
(Jeremías 17:7, 8) Bendito es el hombre físicamente capacitado que confía en Jehová, y cuya confianza Jehová ha llegado a ser. 8 Y ciertamente llegará a ser como un árbol plantado junto a las aguas, que envía sus raíces al mismísimo lado de la corriente de agua; y no verá cuando venga el calor, sino que su follaje realmente resultará frondoso. Y en el año de sequía no se inquietará, ni dejará de producir fruto.
Párrafo 17
(Jeremías 38:19, 20) Entonces el rey Sedequías dijo a Jeremías: “Me tienen aterrado los judíos que se han pasado a los caldeos, no sea que me den en mano de ellos y estos realmente me traten abusivamente”. 20 Pero Jeremías dijo: “No harán tal dar. Obedece, por favor, la voz de Jehová en lo que te estoy hablando, y te irá bien, y tu alma continuará viviendo.
(Jeremías 42:1-12) Entonces todos los jefes de las fuerzas militares y Johanán hijo de Qaréah y Jezanías hijo de Hosaya y toda la gente, desde el más pequeño aun hasta el más grande, se acercaron 2 y dijeron a Jeremías el profeta: “Caiga nuestra petición de favor delante de ti, por favor, y dígnate orar en pro de nosotros a Jehová tu Dios, a favor de todo este resto, porque hemos quedado nosotros, unos pocos de entre muchos, tal como están viéndonos tus ojos. 3 Y que Jehová tu Dios nos informe el camino en que debemos andar y la cosa que debemos hacer”. 4 Ante esto, les dijo Jeremías el profeta: “He oído. Miren, voy a orarle a Jehová su Dios conforme a sus palabras; y ciertamente sucederá que toda palabra que dé Jehová en respuesta a ustedes, yo se la informaré. No retendré de ustedes una palabra”. 5 Y ellos, por su parte, dijeron a Jeremías: “Resulte Jehová testigo fiel y verdadero contra nosotros si no es conforme a toda palabra con que Jehová tu Dios te envíe a nosotros que obremos con exactitud. 6 Sea bueno o malo, es la voz de Jehová nuestro Dios, a quien te estamos enviando, la que nosotros obedeceremos, con el intento de que nos vaya bien porque obedecemos la voz de Jehová nuestro Dios”. 7 Ahora bien, aconteció que al cabo de diez días la palabra de Jehová procedió a ocurrirle a Jeremías. 8 De manera que él mandó llamar a Johanán hijo de Qaréah y a todos los jefes de las fuerzas militares que con él estaban y a toda la gente, desde el más pequeño aun hasta el más grande; 9 y pasó a decirles: “Esto es lo que ha dicho Jehová el Dios de Israel, a quien me enviaron para hacer caer delante de él su petición de favor: 10 ‘Si ustedes sin falta siguen morando en este país, yo también ciertamente los edificaré y no [los] demoleré, y ciertamente los plantaré y no [los] desarraigaré; porque de seguro sentiré pesar por la calamidad que les he causado. 11 No tengan miedo a causa del rey de Babilonia, de quien ustedes están en temor’. ”‘No tengan miedo a causa de él —es la expresión de Jehová—, porque yo estoy con ustedes, para salvarlos y para librarlos de su mano. 12 Y les daré a ustedes misericordias, y él ciertamente les tendrá misericordia y los hará volver a su propio terreno.
(Jeremías 31:7-14) Porque esto es lo que ha dicho Jehová: “Griten fuertemente a Jacob con regocijo, y griten agudamente a la cabeza de naciones. Publíquen[lo]. Den alabanza y digan: ‘Salva, oh Jehová, a tu pueblo, al resto de Israel’. 8 Aquí voy a traerlos de la tierra del norte, y ciertamente los juntaré de las partes más remotas de la tierra. Entre ellos estarán el ciego y el cojo, la mujer que está encinta y la que da a luz, todos juntos. Como gran congregación volverán acá. 9 Con llanto vendrán, y con [sus] súplicas de favor los traeré. Los haré andar a valles torrenciales de agua, por un camino recto en el cual no se les hará tropezar. Porque he llegado a ser para Israel un Padre; y en cuanto a Efraín, él es mi primogénito”. 10 Oigan la palabra de Jehová, oh naciones, y anúncien[la] entre las islas lejanas, y digan: “Aquel que esparció a Israel lo juntará él mismo, y ciertamente lo guardará como un pastor a su hato. 11 Porque Jehová realmente redimirá a Jacob y lo reclamará de la mano de aquel más fuerte que él. 12 Y ciertamente vendrán y clamarán gozosamente en la altura de Sión y se pondrán radiantes por la bondad de Jehová, por el grano y por el vino nuevo y por el aceite y por las crías del rebaño y la vacada. Y su alma simplemente llegará a ser como un jardín bien regado, y ya no volverán a languidecer”. 13 “En aquel tiempo se regocijará la virgen en la danza, también los jóvenes y los viejos, todos juntos. Y ciertamente cambiaré su duelo en alborozo, y de veras los consolaré y los regocijaré, librados de su desconsuelo. 14 Y ciertamente saturaré de grosura el alma de los sacerdotes, y mi propio pueblo quedará satisfecho con mi bondad”, es la expresión de Jehová.
Párrafo 18
(Jeremías 35:3-10) De manera que tomé a Jaazanías hijo de Jeremías hijo de Habazinías y a sus hermanos, y a todos sus hijos, y a toda la casa de los recabitas, 4 y procedí a llevarlos a la casa de Jehová, al comedor de los hijos de Hanán hijo de Igdalías, un hombre del Dios [verdadero], el cual estaba al lado del comedor de los príncipes, que estaba sobre el comedor de Maaseya hijo de Salum el guarda de la puerta. 5 Entonces puse delante de los hijos de la casa de los recabitas tazas llenas de vino, y copas, y les dije: “Beban vino”. 6 Pero ellos dijeron: “No beberemos vino, porque Jonadab hijo de Recab, nuestro antepasado, nos impuso el mandato, y dijo: ‘No deben beber vino, ni ustedes ni sus hijos, hasta tiempo indefinido. 7 Y no deben edificar casa, y no deben sembrar semilla; y no deben plantar viña, ni debe llegar a ser de ustedes. Antes bien, en tiendas deben morar todos sus días, a fin de que sigan viviendo muchos días sobre la superficie del suelo donde están residiendo como forasteros’. 8 De modo que seguimos obedeciendo la voz de Jehonadab hijo de Recab nuestro antepasado en todo lo que él nos mandó, y no bebemos vino en todos nuestros días, nosotros, nuestras esposas, nuestros hijos ni nuestras hijas, 9 y no edificamos casas para morar nosotros en ellas, para que ninguna viña o campo o semilla llegue a ser nuestro. 10 Y seguimos morando en tiendas y obedeciendo y haciendo conforme a todo lo que Jonadab nuestro antepasado nos mandó.
(Jeremías 35:14) Ha habido un llevar a cabo las palabras de Jehonadab hijo de Recab, que él mandó a sus hijos, de no beber vino, y ellos no lo han bebido hasta el día de hoy, porque han obedecido el mandamiento de su antepasado. Y en cuanto a mí, yo les he hablado a ustedes, madrugando y hablando, pero no me han obedecido.
(Jeremías 35:17-19) “Por lo tanto, esto es lo que ha dicho Jehová, el Dios de los ejércitos, el Dios de Israel: ‘Aquí voy a traer sobre Judá y sobre todos los habitantes de Jerusalén toda la calamidad que he hablado contra ellos, por la razón de que les he hablado pero no escucharon, y seguí llamándolos, pero no respondieron’.” 18 Y a la casa de los recabitas dijo Jeremías: “Esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel: ‘Por la razón de que ustedes han obedecido el mandamiento de Jehonadab su antepasado y siguen guardando todos sus mandamientos y haciendo conforme a todo lo que él les mandó, 19 por lo tanto esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel: “No será cortado de Jonadab hijo de Recab un hombre que siempre esté de pie delante de mí”’”.
Párrafo 19
(Jeremías 38:7-13) Y Ébed-mélec el etíope, un hombre que era eunuco y que estaba en la casa del rey, llegó a oír que habían metido a Jeremías en la cisterna; y el rey estaba sentado en la Puerta de Benjamín. 8 De manera que Ébed-mélec salió de la casa del rey y habló al rey, y dijo: 9 “Oh mi señor el rey, estos hombres han hecho mal en todo lo que han hecho a Jeremías el profeta, a quien han arrojado en la cisterna, de modo que morirá donde está a causa del hambre. Porque ya no hay pan en la ciudad”. 10 Entonces el rey dio orden a Ébed-mélec el etíope, y dijo: “Toma a tu cargo de este lugar a treinta hombres, y tienes que sacar de la cisterna a Jeremías el profeta antes que muera”. 11 En conformidad, Ébed-mélec tomó los hombres a su cargo y entró en la casa del rey al lugar debajo de la tesorería y tomó de allí trapos gastados y pedazos de tela gastada, y se los bajó a Jeremías en la cisterna por medio de las sogas. 12 Entonces Ébed-mélec el etíope dijo a Jeremías: “Por favor, ponte los trapos gastados y los pedazos de tela debajo de las axilas, bajo las sogas”. Jeremías ahora lo hizo. 13 Por fin tiraron de Jeremías mediante las sogas y lo subieron de la cisterna. Y Jeremías continuó morando en el Patio de la Guardia.
(Jeremías 39:15-18) Y a Jeremías le ocurrió la palabra de Jehová mientras se hallaba encerrado en el Patio de la Guardia, diciendo: 16 “Ve, y tienes que decir a Ébed-mélec el etíope: ‘Esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel: “Mira, voy a realizar mis palabras sobre esta ciudad para calamidad y no para bien, y ciertamente sucederán delante de ti en aquel día”’. 17 ”‘Y de veras te libraré en aquel día —es la expresión de Jehová—, y no serás dado en la mano de los hombres de quienes tú mismo estás asustado.’ 18 ”‘Porque sin falta te suministraré un escape, y no caerás a espada; y ciertamente llegarás a tener tu alma como despojo, porque has confiado en mí’, es la expresión de Jehová”.
Párrafo 20
(1 Tesalonicenses 5:11) Por lo tanto, sigan consolándose unos a otros y edificándose unos a otros, así como de hecho lo están haciendo.
(1 Tesalonicenses 5:28) La bondad inmerecida de nuestro Señor Jesucristo esté con ustedes.
======================================
Escuela del Ministerio Teocrático

  • Lectura de la Biblia: Lucas 10 al 12 |
  • Puntos sobresalientes
  • (10 min.)
*** w08 15/3 págs. 31-32 Puntos sobresalientes del libro de Lucas ***

10:18. ¿A qué se refería Jesús cuando les dijo a los 70 discípulos: “Contemplaba yo a Satanás ya caído como un relámpago del cielo”? Jesús no estaba diciendo que Satanás ya hubiera sido expulsado del cielo. Eso no aconteció sino hasta poco después de que Cristo fuera entronizado como Rey celestial en 1914 (Rev. 12:1-10). Aunque no podemos ser dogmáticos en este asunto, al hablar de un acontecimiento futuro utilizando el tiempo pasado, Jesús aparentemente quería destacar que sin duda ocurriría.
11:1-4. Al comparar estas instrucciones con las palabras ligeramente diferentes de la oración modelo —que se pronunció en el Sermón del Monte cerca de un año y medio antes—, queda claro que nuestras oraciones no deben ser una mera repetición de ciertas palabras (Mat. 6:9-13).
11:5, 13. Aunque Jehová desea contestar nuestras oraciones, debemos ser persistentes al orar (1 Juan 5:14).
11:27, 28. La verdadera felicidad proviene de cumplir fielmente la voluntad de Dios y no de las relaciones familiares o los logros materiales.
11:41. Nuestras dádivas de misericordia deben proceder de un corazón bien dispuesto y lleno de amor.
12:47, 48. Quien recibe más responsabilidades pero no cumple con ellas es más censurable que quien no conoce o comprende a cabalidad sus obligaciones.

Km 5/04 pág. 4 párr. 4 “Ensánchense”
4. ¿Cómo podemos estrechar nuestra relación con los hermanos de la congregación?
4 Interesémonos por los demás. ¿Cómo ensanchar nuestros tiernos cariños por los hermanos en la fe? Además de saludarlos en las reuniones cristianas, esforcémonos por entablar conversaciones significativas con ellos. Sin entrometernos en su vida privada, manifestemos interés personal (Fili. 2:4; 1 Ped. 4:15). Otra manera de demostrar que nos importan es invitándolos a comer (Luc. 14:12-14). También se pueden hacer planes para salir al ministerio del campo juntos (Luc. 10:1). Cuando tomamos la iniciativa para conocer mejor a nuestros hermanos, fomentamos la unidad en la congregación (Col. 3:14).

km 11/08 pág. 4 párr. 5 ¿Maestro yo?
5. ¿Qué otro medio de capacitación tenemos dentro de la congregación para llegar a ser maestros?
5 Los primeros cristianos sin duda aprendían unos de otros mientras participaban juntos en la obra de hacer discípulos (Luc. 10:1). Siguiendo su ejemplo, procure en lo posible acompañar a publicadores de experiencia —como precursores, ancianos y superintendentes viajantes— en la obra de dirigir estudios. Fíjese en cómo explican las verdades bíblicas valiéndose de las sencillas ilustraciones y de otras ayudas que se hallan en nuestras publicaciones. Pídales sugerencias para ser mejor maestro (Pro. 1:5; 27:17). Vea toda esa enseñanza como lo que es: capacitación divina (2 Cor. 3:5).
w12 15/2 pág. 21 párr. 10 Cómo mantener un buen espíritu en la congregación
10. ¿Cómo beneficia a los miembros de la congregación nuestro empeño por mejorar la calidad de nuestra predicación?
10 Algo que también influye positivamente en los demás es nuestro empeño por mejorar la calidad de nuestra predicación. En la medida en que nos interesemos por las personas y nos esforcemos por tocarles el corazón, aumentará el entusiasmo que sentimos por esta labor (Mat. 9:36, 37). Y es muy probable que les transmitamos ese mismo ánimo a quienes nos acompañan. Pensemos: ¿por qué envió Jesús a sus discípulos de dos en dos? (Luc. 10:1.) No solo para que se animaran y aprendieran unos de otros, sino también para que se intensificara su celo por el ministerio. Al fin y al cabo, ¿quién no agradece salir con hermanos que predican con entusiasmo? Su espíritu nos alienta y nos incita a seguir anunciando el Reino (Rom. 1:12).
w12 15/11 págs. 28-29 párr. 11 Perdónense liberalmente unos a otros
11. ¿Cómo debemos responder cuando la gente no nos recibe bien en la predicación?
11 ¿Cómo puede controlarse si alguien es desconsiderado con usted en la predicación? Cuando Jesús envió a los 70, les dijo que desearan la paz a todos los hogares que visitaran. Y añadió: “Si hay allí un amigo de la paz, la paz de ustedes descansará sobre él. Pero si no lo hay, se volverá a ustedes” (Luc. 10:1, 5, 6). Nos alegramos cuando alguien responde favorablemente a nuestro ministerio, pues en ese caso puede beneficiarse del mensaje que llevamos. No obstante, a veces la respuesta no es nada pacífica. ¿Qué hará usted cuando eso le suceda? Jesús indicó que la paz que le desea a la persona ha de quedarse con usted. Sin importar cómo lo reciba la gente, debe irse de su casa sin perder la calma. Si respondiera a las provocaciones, no podría conservar la paz.
km 8/07 pág. 5 párr. 7 Una magnífica meta para el nuevo año de servicio
7. ¿Por qué es conveniente mencionar el precursorado en nuestras oraciones?
7 Cómo lograrlo. Cuando oremos a Jehová, debemos contarle cuántos deseos tenemos de ampliar nuestro servicio y pedirle que bendiga los esfuerzos que estamos haciendo (Rom. 12:11, 12). Él nos guiará para que tomemos buenas decisiones al elaborar un nuevo horario (Sant. 1:5). Y si nos faltan las ganas, pidámosle que nos ayude a disfrutar de la predicación (Luc. 10:1, 17).
km 4/08 pág. 3 párr. 7 “Sigan sus pasos con sumo cuidado y atención”
7. ¿Por qué perseveró Jesús en su ministerio?
7 Perseveró a pesar de la apatía y la oposición. Aunque Jesús efectuó obras poderosas, muchos no le hicieron caso (Luc. 10:13). Incluso hubo miembros de su propia familia que pensaron: “Ha perdido el juicio” (Mar. 3:21). Con todo, Jesús perseveró. Conservó su actitud positiva porque estaba completamente convencido de que tenía la verdad que podía liberar a los hombres (Juan 8:32). Nosotros también estamos decididos a no rendirnos, con la ayuda de Jehová (2 Cor. 4:1).
km 10/03 pág. 7 Repaso de la Escuela del Ministerio Teocrático
¿Cómo nos puso el ejemplo Jesús, “el testigo fiel y verdadero”, al emplear la Biblia en el ministerio? (Rev. 3:14.) [be-S pág. 143 § 2, 3.] Jesús solía citar, parafrasear o referirse a las Escrituras al enseñar (Mat. 4:3-10; 12:1-8; Luc. 10:25-28; 17:32; 24:27, 44-47). Podía decir, con razón, que cuanto enseñaba no provenía de él (Juan 8:26; 14:10). Nosotros también deberíamos acostumbrarnos a contestar las preguntas con la Biblia.

km 10/11 pág. 1 párr. 3 Ayudemos a nuestros oyentes a razonar
3. ¿Cómo nos ayudan las preguntas bien pensadas a razonar con los demás?
3 Hagámosles preguntas bien pensadas. Es imposible dirigir por teléfono a alguien que va de camino a cierto lugar si no sabemos por dónde va. De igual modo, es imposible ayudar a nuestros oyentes a llegar a la conclusión correcta si desconocemos lo que piensan. Antes de hacer razonar a las personas, Jesús solía plantearles preguntas para saber lo que pensaban. Por ejemplo, cuando alguien le preguntó: “¿Qué he de hacer para heredar la vida eterna?”, Jesús indagó su parecer antes de contestarle (Luc. 10:25-28). En otra ocasión, cuando Pedro expresó un punto de vista incorrecto, Jesús le formuló preguntas bien pensadas para corregir su modo de ver las cosas (Mat. 17:24-26). Por tanto, cuando nuestros oyentes expresen dudas o alguna idea incorrecta, usemos preguntas para ayudarlos a razonar.

km 7/07 pág. 4 párr. 3 Por qué seguimos regresando
3. ¿Cómo nos ayuda el amor a seguir predicando?
3 También seguimos predicando por amor al prójimo (Luc. 10:27). Jehová no quiere que nadie sea destruido (2 Ped. 3:9). Incluso en los territorios que trabajamos a menudo, seguimos encontrando personas que quieren servir a Jehová. Por ejemplo, en la isla de Guadalupe, donde 1 de cada 56 habitantes es testigo de Jehová, se bautizaron 214 nuevos discípulos el año pasado. Y a la Conmemoración asistieron casi veinte mil personas, es decir, 1 de cada 22 habitantes.
 
w04 1/10 pág. 16 párr. 9 “Ténganse tierno cariño unos a otros”
9. ¿Qué pasos han dado algunos cristianos para estrechar los lazos de amistad con sus hermanos en la fe? (Pueden mencionarse ejemplos locales.)
9 Ya sea como familia o individualmente, podemos ‘ensancharnos’ visitando a otros hermanos, compartiendo alguna comida sencilla o realizando actividades sanas juntos (Lucas 10:42; 14:12-14). Hakop, quien de vez en cuando organiza comidas campestres para grupos pequeños, explica: “Vienen hermanos de todas las edades, así como padres que crían solos a sus hijos. Todos se llevan un feliz recuerdo a casa y se sienten más cerca unos de otros”. Los cristianos no debemos contentarnos con estar unidos en la fe; debemos esforzarnos por ser verdaderos amigos (3 Juan 14).

w04 1/2 pág. 8 párr. 2 “Señor, enséñanos a orar”
2. a) ¿Qué indica que Jesús no pretendía que repitiéramos la oración modelo palabra por palabra? b) ¿Por qué debe interesarnos aprender a orar?
2 Unos dieciocho meses antes, en su Sermón del Monte, Jesús había dado a sus discípulos un modelo en el que basarse para orar (Mateo 6:9-13). Es posible que ese discípulo en particular no estuviera presente en aquella ocasión, de modo que Jesús bondadosamente volvió a enumerar los puntos clave de su oración modelo. Cabe destacar que no los recitó palabra por palabra, lo que indica que no se trataba de un rezo litúrgico que debiera aprenderse de memoria (Lucas 11:1-4). Al igual que aquel discípulo cuyo nombre no se menciona, nosotros también deseamos aprender a orar, a fin de que nuestras oraciones nos acerquen más a Jehová. Examinemos, pues, la versión más ampliada de la oración modelo, la escrita por el apóstol Mateo. Se compone de siete peticiones, tres de las cuales se relacionan con los propósitos de Dios, y las otras cuatro, con nuestras necesidades materiales y espirituales. En este artículo nos centraremos en las tres primeras.
w03 15/9 pág. 18 párr. 12 ¿Por qué debemos orar incesantemente?
12. ¿Cómo ilustra la oración el interés de Jehová en cada uno de nosotros?
12 Otra razón para acercarnos a Jehová mediante la oración es que él, a su vez, se acerca a nosotros (Santiago 4:8). Cuando nos sinceramos con Jehová en oración, notamos que él se interesa en nuestras necesidades y nos cuida tiernamente. Experimentamos su amor de un modo muy personal. Jehová no ha delegado en nadie la responsabilidad de escuchar todas y cada una de las oraciones que sus siervos le dirigen a él como su Padre celestial (Salmo 66:19, 20; Lucas 11:2). Además, nos invita a ‘echar sobre él toda nuestra inquietud, porque él se interesa por nosotros’ (1 Pedro 5:6, 7).

kl cap. 18 pág. 178 párr. 18 Póngase el objetivo de servir a Dios para siempre
18. Después del bautismo, ¿qué otras metas podría ponerse?
18 Para aguantar en el servicio a Jehová, tiene que ponerse metas espirituales. Una meta loable es la de aumentar su conocimiento de Dios mediante el estudio personal regular de su Palabra. Aparte tiempo para leer la Biblia todos los días. (Salmo 1:1, 2.) Asista a las reuniones cristianas con regularidad, pues el compañerismo que allí encuentra contribuirá a su fortaleza espiritual. ¿Por qué no se pone la meta de comentar en las reuniones de congregación y así alabar a Jehová y esforzarse por edificar a los presentes? (Romanos 1:11, 12.) Otra meta podría ser la de mejorar la calidad de sus oraciones. (Lucas 11:2-4.)

w11 15/12 págs. 25-26 párrs. 17-19 Guiados por el espíritu de Dios en el siglo primero y en nuestros días
17. ¿Cómo damos prueba de que tenemos el espíritu de Dios?
18, 19. ¿Qué ayuda nos brindará Jehová por medio de su espíritu, y qué estamos decididos a hacer?
17 Por eso, no importa si nuestra esperanza es vivir para siempre en el cielo o en la Tierra: Jehová nos da a todos el “poder [...] más allá de lo normal” que nos permitirá mantenernos fieles y alcanzar la recompensa (2 Cor. 4:7………….19…………..Él nos dará los medios necesarios para entender su Palabra, enfrentarnos a los problemas de la vida y predicar las buenas nuevas. A la hora de solicitar a Dios su espíritu, recordemos esta exhortación: “Sigan pidiendo, y se les dará; sigan buscando, y hallarán; sigan tocando, y se les abrirá” (Luc. 11:9, 13). Así es: no dejemos de rogarle a Jehová que, tal como ha estado haciendo a lo largo de toda la historia, continúe dándonos su espíritu para que nos guíe.

w00 1/9 pág. 12 párr. 6 Mostremos una actitud de espera
6. ¿Cómo ayuda la actitud de espera al que lucha contra un problema personal?
6 Tal vez se requiera una actitud de espera cuando nos preocupa un problema personal o luchamos contra una debilidad. Supongamos que pedimos ayuda a Jehová, pero el problema persiste. ¿Qué hacer entonces? Tenemos que seguir efectuando lo que esté a nuestro alcance para remediar el problema y tener fe en las palabras de Jesús: “Sigan pidiendo, y se les dará; sigan buscando, y hallarán; sigan tocando, y se les abrirá” (Lucas 11:9). Oremos de continuo y esperemos en Jehová. Al debido tiempo y a su debida manera, Jehová contestará nuestras oraciones (1 Tesalonicenses 5:17).

w07 15/12 pág. 13 párr. 14 ¿Está usted preparado para el día de Jehová?
14. Si deseamos cultivar autodominio, ¿por qué debemos pedir espíritu santo?
14¿Qué puede hacer si tiene mal genio y se da cuenta de que necesita más autodominio? Esta cualidad es parte del fruto que el espíritu santo puede producir en usted. Por lo tanto, pídale a Jehová su espíritu. Recuerde que Jesús dijo: “Sigan pidiendo, y se les dará; sigan buscando, y hallarán; sigan tocando, y se les abrirá [...;] si ustedes, aunque son inicuos, saben dar buenos regalos a sus hijos, ¡con cuánta más razón dará el Padre en el cielo espíritu santo a los que le piden!” (Lucas 11:9-13).

pe cap. 27 pág. 225 párr. 1 Cómo obtener ayuda mediante la oración
1. ¿Qué ayuda necesitamos de Dios, y cómo la recibimos?
PARA QUE SE MANTENGAN LIBRES de la influencia inicua del mundo, los cristianos necesitan especialmente la ayuda que se recibe mediante la oración. Jesús dijo: “Dará el Padre en el cielo espíritu santo a los que le piden.” (Lucas 11:13) Necesitamos el espíritu santo o fuerza activa de Dios, tal como necesitamos estudiar su Palabra y asociarnos con Su organización. Pero para recibir espíritu santo, tenemos que orar por él.
w00 1/11 pág. 16 párr. 20 Podemos preservar nuestra pureza moral
20. ¿Cómo nos beneficiamos al obedecer los justos mandatos divinos?
20 “¡Felices son los que oyen la palabra de Dios y la guardan!”, declaró Jesús (Lucas 11:28). La obediencia a los justos mandatos divinos nos hará felices ahora y por toda la eternidad. Si hemos permanecido puros en sentido moral, sigamos en la misma senda aprovechándonos de todo lo que Jehová nos proporciona para ayudarnos. Si hemos caído en la inmoralidad, animémonos al saber que Jehová está dispuesto a perdonar a quienes se arrepienten sinceramente, y resolvámonos a no reincidir jamás (Isaías 55:7).

lv cap. 5 págs. 58-59 párr. 16 Qué implica no ser parte del mundo
16. ¿En qué sentido es el espíritu del mundo contrario a las enseñanzas de Jesús, y qué preguntas deberíamos hacernos?
16 El espíritu del mundo es muy engañoso. Mueve a millones de personas a buscar la felicidad en el dinero y los bienes materiales. Sin embargo, Jesús dijo que “hasta cuando uno tiene en abundancia, su vida no resulta de las cosas que posee” (Lucas 12:15). Jesús no fue extremista ni recomendó llevar una vida austera de constantes privaciones. Pero sí enseñó que solo conseguirán la verdadera felicidad y la salvación “los que tienen conciencia de su necesidad espiritual” y mantienen el ojo “sencillo”, es decir, los que gozan de una visión espiritual clara, centrada y pura (Mateo 5:3; 6:22, 23). Por eso, preguntémonos: “¿De verdad creo lo que Jesús enseñó, o estará influyendo en mí ‘el padre de la mentira’?” (Juan 8:44). “¿Qué dan a entender mis palabras, mis metas, mis prioridades y mi forma de vivir?” (Lucas 6:45; 21:34-36; 2 Juan 6.)

w05 15/12 pág. 27 párr. 12 Ahora es el momento de actuar con decisión
12. ¿En qué situación peligrosa se hallan algunos cristianos bautizados, y qué deben hacer?
12 Por desgracia, algunos cristianos bautizados se han hecho irregulares o inactivos en su servicio a Dios (Hebreos 10:23-25; 13:15, 16). Otros han perdido el celo debido a la persecución, la lucha por conseguir el sustento, el afán de riquezas o la búsqueda de placeres egoístas. Jesús advirtió que estas cosas harían tropezar, ahogarían y entramparían a algunos de sus seguidores (Mateo 10:28-33; 13:20-22; Lucas 12:22-31; 21:34-36). Pero en vez de ‘cojear entre dos opiniones’, por así decirlo, deben ‘ser celosos y arrepentirse’ y cumplir de manera resuelta con su dedicación a Dios (Revelación 3:15-19).
km 4/04 pág. 4 párr. 5 Alimento espiritual al debido tiempo
5. ¿Qué motivos de alegría nos proporcionan las asambleas de distrito?
5 Toda asamblea celebrada antes del Armagedón —ya sea en un campo de refugiados, en un país en guerra, o en un marco más pacífico y multitudinario— constituye una victoria sobre Satanás. Dado que formamos una hermandad unida, atesoramos cada oportunidad de congregarnos en las asambleas de distrito (Eze. 36:38). Estamos seguros de que, en su gran amor, Jehová nos proveerá una vez más “víveres a su debido tiempo” (Luc. 12:42).

w06 15/1 pág. 29 párr. 16 Opongámonos al Diablo, y él huirá
16. ¿Cómo podemos estar siempre protegidos contra las fuerzas espirituales malignas?
16 A fin de estar siempre protegidos contra las fuerzas espirituales malignas, tenemos, entre otras cosas, que leer y estudiar la Palabra de Dios con regularidad, haciendo para ello buen uso de las publicaciones que nos proporciona “el mayordomo fiel” (Lucas 12:42). Así llenaremos la mente de sana información espiritual, en armonía con el consejo de Pablo: “Hermanos, cuantas cosas sean verdaderas, cuantas sean de seria consideración, cuantas sean justas, cuantas sean castas, cuantas sean amables, cuantas sean de buena reputación, cualquier virtud que haya y cualquier cosa que haya digna de alabanza, continúen considerando estas cosas” (Filipenses 4:8).

w03 15/5 pág. 17 párr. 11 ¡Escuche lo que el espíritu dice!
11. ¿Qué debemos hacer si nos estamos adormeciendo espiritualmente?
11 Ninguno de nosotros desea caer en el lastimoso estado de la congregación de Sardis, pero ¿y si percibimos que nuestra espiritualidad se está adormeciendo? Por nuestro propio bien, actuemos sin demora. Si nos estamos yendo por malos caminos o hemos descuidado las reuniones o el ministerio, roguemos a Jehová que nos ayude (Filipenses 4:6, 7, 13). La lectura diaria de la Biblia y el estudio de las Escrituras y de las publicaciones del “mayordomo fiel” nos mantendrán despiertos espiritualmente (Lucas 12:42-44). De ese modo nos pareceremos a los cristianos de Sardis que contaban con la aprobación de Cristo y seremos una bendición para nuestros hermanos en la fe.

w06 15/11 pág. 26 párr. 2 Aceptemos siempre la disciplina de Jehová
2. ¿Qué implica la disciplina, y a través de qué medios podemos recibirla?
2 La “disciplina” mencionada en la Biblia implica castigo y corrección, al igual que instrucción y educación. El apóstol Pablo escribió: “Ninguna disciplina parece por el presente ser cosa de gozo, sino penosa; sin embargo, después, a los que han sido entrenados por ella, da fruto pacífico, a saber, justicia” (Hebreos 12:11). Lo cierto es que cuando aceptamos y acatamos la disciplina divina, nos mantenemos en la senda de la justicia y nos acercamos al Dios santo, Jehová (Salmo 99:5). La corrección puede venir a través de otros cristianos, de lo que oímos en las reuniones y de lo que aprendemos al estudiar la Palabra de Dios y las publicaciones del “mayordomo fiel” (Lucas 12:42-44). ¡Cuánto debemos agradecer que se nos indiquen los cambios que tenemos que efectuar!
===========================

  • Núm. 1: Lucas 12:1-21.
  • ======================
  • Núm. 2: ¿A qué se puede atribuir el desarrollo de las varias características raciales? (rs pág. 292 párrs. 2–pág. 293 párr. 2)
“Todos los hombres que viven hoy pertenecen a una sola especie, Homo sapiens, y se derivan de un tronco común. [...] Las diferencias biológicas entre los seres humanos se deben a diferencias en la constitución hereditaria y a la influencia del ambiente en dicho potencial genético. En la mayor parte de los casos esas diferencias se deben a la interacción de estos dos conjuntos de factores. [...] Muchas veces las diferencias entre personas que pertenecen a una misma raza o a una misma población son mayores que las diferencias medias entre razas o poblaciones.” (Un cuerpo internacional de científicos convocado por la UNESCO, según la cita en Statement on Race, Nueva York, 1972, tercera edición, Ashley Montagu, págs. 149, 150.)
“Una raza es simplemente uno de los conjuntos de genes parcialmente aislados en que llegó a estar dividido el género humano durante su esparcimiento geográfico primigenio y después. En términos generales se ha desarrollado una raza en cada una de las cinco principales zonas continentales de la Tierra. [...] El hombre en realidad se ramificó genéticamente durante esta fase de la historia, y podemos medir y estudiar los resultados de dicha ramificación en lo que queda hoy de las razas geográficas antiguas. Como sería de esperar, la ramificación parece estar correlacionada con el grado de aislamiento. [...] Cuando en los continentes tuvo lugar la formación de las razas, quedando ‘embotelladas’ miles de poblaciones en conjuntos aislados de genes por todo el mundo, se establecieron las diferencias por frecuencia de genes que vemos en la actualidad. [...] La paradoja que se nos presenta es que cada grupo de seres humanos parece diferente en lo exterior, y, sin embargo, debajo de estas diferencias hay una similitud fundamental” (Heredity and Human Life [La herencia y la vida humana], Nueva York, 1963, H. L. Carson, págs. 151, 154, 162, 163). (Así, pues, a principios de la historia humana, cuando un grupo de personas quedaba aislado de otros grupos y las personas se casaban con miembros de su propio grupo, en su prole se enfatizaban ciertas combinaciones de características genéticas distintivas.)

¿Enseña la Biblia que las personas de la raza negra hayan sido maldecidas?
Esa idea se basa en un entendimiento equivocado de Génesis 9:25, donde se citan las siguientes palabras de Noé: “Maldito sea Canaán. Llegue a ser él el esclavo más bajo para sus hermanos”. Lea usted cuidadosamente ese texto; no dice nada respecto al color de la piel. La maldición se debió a que el hijo de Cam, Canaán, evidentemente había cometido un acto vergonzoso, por el cual mereció que se le maldijera. Pero ¿quiénes fueron los descendientes de Canaán? No fueron gente de piel negra, sino pueblos de piel más clara que vivieron al este del mar Mediterráneo. Debido a sus prácticas depravadas, sus ritos demoníacos, su idolatría y su práctica de sacrificar a sus infantes, llegaron a estar bajo juicio divino, y Dios dio a Israel la tierra que ocupaban los cananeos (Gén. 10:15-19). No se destruyó a todos los cananeos; algunos fueron asignados a trabajos forzados, en cumplimiento de la maldición. (Jos. 17:13.)
¿De cuál de los hijos de Noé descendieron las personas de piel oscura?

“Los hijos de Cus [otro de los hijos de Cam] fueron Seba y Havila y Sabta y Raama y Sabteca” (Gén. 10:6, 7). Posteriormente, las referencias bíblicas a Cus equivalen por lo general a Etiopía. Seba se usa luego con referencia a otro pueblo de la parte oriental de África y evidentemente cercano a Etiopía (Isa. 43:3, nota, NM, edición con referencias, en inglés.)
========================

  • Núm. 3: ¿Por qué vemos a Jehová como nuestro Padre? (Mat. 6:9)
*** w10 15/2 págs. 3-5 ¿Vemos a Jehová como nuestro Padre? ***

¿Vemos a Jehová como nuestro Padre?
EN CIERTA ocasión, un discípulo del Gran Maestro le hizo esta petición: “Señor, enséñanos a orar”. Él le respondió: “Cuando oren, digan: ‘Padre, santificado sea tu nombre’” (Luc. 11:1, 2). Jesús pudo haberse referido a Jehová con títulos tan sublimes como “Todopoderoso”, “Magnífico Instructor”, “Creador”, “Anciano de Días” y “Rey de la eternidad” (Gén. 49:25; Isa. 30:20; 40:28; Dan. 7:9; 1 Tim. 1:17). Sin embargo, optó por llamarlo “Padre”. ¿Por qué? Tal vez porque desea que nos acerquemos al Ser más grandioso del universo con la misma actitud con la que se acerca un humilde niño a su querido papá.
No obstante, hay personas a quienes les cuesta ver a Dios como Padre. Una cristiana llamada Atsuko admitió que ese fue su caso: “Aunque ya estaba bautizada, por años se me hizo difícil acercarme a Jehová y dirigirme a él como mi Padre”. Y luego señaló un motivo por el que se sentía distanciada: “No recuerdo ni una sola ocasión en la que mi padre biológico me tratara con cariño”.
En estos últimos días tan críticos, muchos hombres no demuestran el “cariño natural” que anhelan sus hijos (2 Tim. 3:1, 3). Por eso, no es de extrañar que tanta gente se sienta como Atsuko. Sin embargo, es alentador saber que tenemos sobradas razones para ver a Jehová como a un Padre que nos ama.
Jehová cubre todas nuestras necesidades
Para ver a Jehová como Padre, primero es necesario saber cómo es él. Pero ¿de qué manera podemos conseguirlo? Jesús dio la respuesta: “Nadie conoce plenamente al Hijo sino el Padre, ni conoce nadie plenamente al Padre sino el Hijo, y cualquiera a quien el Hijo quiera revelarlo” (Mat. 11:27). En efecto, no hay mejor forma de descubrir cómo es nuestro Padre celestial que meditando en lo que Cristo enseñó sobre él. Pues bien, ¿qué cosas nos reveló?
Primeramente, reconoció que Dios era el Origen de su existencia con estas palabras: “Yo vivo a causa del Padre” (Juan 6:57). Y lo mismo cabe decir de nosotros (Sal. 36:9; Hech. 17:28). ¿Por qué nos dio Jehová la vida? Por amor. Sin duda, deberíamos corresponderle con el mismo sentimiento.
La mayor muestra de amor por la humanidad la hizo al entregar a su querido Hijo como sacrificio para rescatarnos. Así, aunque somos pecadores, podemos gozar de su amistad (Rom. 5:12; 1 Juan 4:9, 10). Además, como nuestro Padre celestial siempre cumple sus promesas, tenemos la certeza de que todos los que lo amamos y obedecemos disfrutaremos en el futuro de “la gloriosa libertad de los hijos de Dios” (Rom. 8:21).
Otra prueba del amor de Jehová es que cada día “hace salir su sol sobre [todos]” (Mat. 5:45). Difícilmente se nos ocurre orar para que salga el Sol. Pero ¡qué necesarios y agradables son sus rayos! Nuestro Padre celestial cubre con generosidad incomparable todas nuestras necesidades, y de hecho sabe cuáles son antes de que se las demos a conocer. ¿No es cierto que deberíamos observar detenidamente la creación y meditar en la forma tan amorosa como la cuida? (Mat. 6:8, 26.)

Nuestro Padre vela por nosotros
Mediante el profeta Isaías, Dios hizo esta promesa a su pueblo de la antigüedad: “Aunque se aparten los montes y vacilen las colinas, mi amor no se apartará de ti, ni vacilará mi alianza de paz, dice el que te ama entrañablemente, el Señor” (Isa. 54:10, Sagrada Biblia, Universidad de Navarra, nota). Jesús recalcó el tierno cuidado de Dios en una oración que le dirigió durante la última noche de su vida humana. Hizo este ruego a favor de sus discípulos: “Ellos están en el mundo y yo voy a ti. Padre santo, vigílalos por causa de tu propio nombre” (Juan 17:11, 14). En respuesta a esta súplica, Jehová ha velado por los cristianos y los ha protegido.
Uno de los medios que usa para librarnos de los ataques de Satanás es el oportuno alimento espiritual que sirve mediante “el esclavo fiel y discreto” (Mat. 24:45). Si lo consumimos regularmente, nos será más fácil vestirnos con “la armadura completa que proviene de Dios”. Fijémonos tan solo en una de sus piezas: “el escudo grande de la fe, con el cual pod[emos] apagar todos los proyectiles encendidos del inicuo” (Efe. 6:11, 16). Ciertamente, la fe nos salvaguarda contra los peligros espirituales y es un testimonio del poder protector de nuestro Padre.
Comprenderemos aún mejor el entrañable amor de nuestro Padre celestial si reflexionamos en la manera como actuó Cristo durante su vida en la Tierra. En Marcos 10:13-16 vemos a Jesús diciendo a sus discípulos: “Dejen que los niñitos vengan a mí”. Y cuando aquellos pequeños se juntan en torno a él, los bendice y los abraza tiernamente. ¡Qué contentos tuvieron que ponerse! Jehová tiene la misma actitud que su Hijo. También espera a la gente con los brazos abiertos. ¿Cómo lo sabemos? Porque Jesús dijo: “El que me ha visto a mí ha visto al Padre también” (Juan 14:9).
Jehová es un inagotable manantial de amor. Cubre nuestras necesidades a la perfección, nos protege como nadie y anhela que nos acerquemos a él (Sant. 4:8). ¡No podría haber un padre mejor!
Innumerables beneficios
Si ponemos nuestra confianza en Jehová como Padre de amor infinito, cosecharemos grandes bendiciones (Pro. 3:5, 6). El propio Jesús obtuvo beneficios por confiar de todo corazón en Dios. Así, pudo decir a sus discípulos: “No estoy solo, sino que conmigo está el Padre que me envió” (Juan 8:16). Siempre tuvo la certeza de que él lo apoyaba. Por ejemplo, el día de su bautismo le escuchó pronunciar estas alentadoras palabras: “Este es mi Hijo, el amado, a quien he aprobado” (Mat. 3:15-17). Y justo antes de morir, exclamó: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu” (Luc. 23:46). Hasta en aquellos duros momentos, su fe no vaciló ni un instante.
En nuestro caso debe ser igual. Teniendo a Dios de nuestro lado, no existen motivos para temer (Sal. 118:6). Atsuko, de la cual hablamos al principio, acostumbraba enfrentarse a los problemas con sus propias fuerzas. Pero hizo un estudio de la vida y ministerio de Jesús, y particularmente de su estrecha relación con Jehová. ¿Cuál fue el resultado? “Aprendí el verdadero significado de tener un Padre y confiar en él. Sentí una paz y felicidad sin igual. La verdad es que no hay ninguna razón para ceder a la inquietud.”
¿De qué otra manera nos beneficia ver a Jehová como nuestro Padre? Pues bien, los hijos por lo general aman a sus progenitores y desean complacerles. Jesús le tenía mucho cariño a su Padre celestial, y por eso dijo: “Siempre hago las cosas que le agradan” (Juan 8:29). Si nosotros también amamos a Dios, actuaremos con sabiduría y lo “alab[aremos] públicamente” (Mat. 11:25; Juan 5:19).

“Tengo agarrada tu diestra”
El Padre celestial nos ha proporcionado un “ayudante”, el espíritu santo, que, como indicó Jesús, nos “guiará a toda la verdad” (Juan 14:15-17; 16:12, 13). En efecto, nos permitirá entender mejor al Padre. También nos ayudará a “derrumbar cosas fuertemente atrincheradas” en nuestro corazón, es decir, cualquier idea equivocada que podamos tener, y así poner “bajo cautiverio todo pensamiento para hacerlo obediente al Cristo” (2 Cor. 10:4, 5). Con total confianza, solicitemos a Dios el “ayudante” prometido, pues Jesús nos dice: “Dará el Padre en el cielo espíritu santo a los que le piden” (Luc. 11:13). Y roguémosle también que nos ayude con su espíritu a estrechar nuestra relación con él.
Los niños pierden el miedo y se sienten protegidos cuando caminan de la mano de su papá. Si vemos a Jehová como nuestro Padre, confiaremos en esta alentadora promesa: “Yo, Jehová tu Dios, tengo agarrada tu diestra, [y soy] Aquel que te dice: ‘No tengas miedo. Yo [...] te ayudaré’” (Isa. 41:13). Como vemos, tenemos ante nosotros el maravilloso privilegio de “andar” con Dios por la eternidad (Miq. 6:8). Si seguimos haciendo su voluntad, gozaremos del amor, la alegría y la seguridad que nos ofrece nuestro Padre Jehová.
===================================
Reunión de Servicio
Cántico 60
"JEHOVA TE DARÁ FUERZAS"

  • 10 min. Está en nuestra mano ser una fuente de estímulo (Rom. 1:11, 12). Análisis con el auditorio a cargo del superintendente de servicio. Mencione la cantidad de precursores regulares de la congregación. Describa distintas maneras de animarlos, tales como darles encomio, acompañarlos en el ministerio, contribuir para el transporte o invitarlos a comer algo. Pida a los precursores regulares que se expresen sobre el ánimo que les han dado los hermanos. Si no hay precursores regulares en la congregación, analice cómo se puede animar a los que hacen el precursorado auxiliar.
(Romanos 1:11, 12) Porque anhelo verlos, para impartirles algún don espiritual a fin de que se les haga firmes; 12 o, más bien, para que haya un intercambio de estímulo entre ustedes, por cada uno mediante la fe del otro, tanto la de ustedes como la mía.
===================

10 min. Respuestas a preguntas sobre los últimos días. Análisis con el auditorio basado en el libro Razonamiento, página 427, párrafo 5, a página 429, párrafo 1. Incluya una demostración breve basada en una de las sugerencias.
  • ¿Por qué permite Dios que pase tanto tiempo antes de destruir a los inicuos?

    2 Ped. 3:9: “No es lento Jehová respecto a su promesa, según lo que algunos consideran lentitud, sino que es paciente para con ustedes porque no desea que ninguno sea destruido, sino desea que todos alcancen el arrepentimiento.”
    Mar. 13:10: “En todas las naciones primero tienen que predicarse las buenas nuevas.”
    Mat. 25:31, 32, 46: “Cuando el Hijo del hombre [Jesucristo] llegue en su gloria, y todos los ángeles con él, entonces se sentará sobre su glorioso trono. Y todas las naciones serán juntadas delante de él, y separará a la gente unos de otros, así como el pastor separa las ovejas de las cabras. Y éstos [que no reconocen a los hermanos espirituales de Cristo como representantes del Rey mismo] partirán al cortamiento eterno, pero los justos a la vida eterna.”
    Véanse, también, las páginas 357, 358 y 195-197.

    Si alguien dice...

    ‘Hoy día las condiciones no son peores de lo que fueron antes; siempre ha habido guerras, hambres, terremotos y crímenes’
    Usted pudiera contestar: ‘Puedo entender por qué piensa de esa manera. Hemos nacido en un mundo en el que estas cosas son parte de las noticias diarias. Pero los historiadores explican que hay algo acerca del siglo XX que es totalmente diferente. (Lea las citas que se dan en las páginas 425, 426)’.

    O contestar: ‘No se trata sencillamente del hecho de que haya habido guerras, hambres, terremotos y crímenes lo que es importante. ¿Se da cuenta usted de que la señal que Jesús dio era una señal compuesta?’ Entonces pudiera añadir: ‘Él no dijo que algún acontecimiento por sí solo sería prueba de que estaríamos en “los últimos días”. Pero cuando toda la señal queda manifiesta, eso es significativo... y especialmente cuando se presenta en escala global y comienza en un año que ha sido señalado por la cronología bíblica’. (Véanse las páginas 420-425, y las páginas 167-169.)

    ‘¿Cómo sabe usted que a alguna generación futura no le cuadraría mejor la profecía que a esta generación?’
    Usted pudiera contestar: ‘Esa es una pregunta interesante, y la respuesta a ella hace resaltar el hecho de que en realidad vivimos en los “últimos días”. ¿Por qué? Pues, parte de la señal que Jesús dio tiene que ver con guerras entre naciones y entre reinos. Pero, ¿qué sucedería hoy día si el cumplimiento de la señal exigiera que tuviéramos que esperar hasta que estallara otra guerra de esfuerzo total entre las superpotencias? Tal guerra dejaría pocos sobrevivientes, si algunos. Así, como usted puede ver, el propósito de Dios de que haya sobrevivientes indica que ahora vivimos muy cerca del fin de este viejo sistema’.

    O contestar: ‘El ver si los acontecimientos mundiales corresponden con esta profecía es como ver la correspondencia entre ciertas huellas digitales y los dedos que las produjeron. No habrá ninguna otra persona que deje las mismas huellas. De igual manera, el patrón de acontecimientos que comenzó en 1914 no se repetirá en ninguna generación futura’. Entonces pudiera añadir: 1) ‘Todas las partes que componen la señal se ven claramente’. 2) ‘Es seguro que nosotros no queremos ser como la gente de los días de Noé (Mat. 24:37-39)’.

    ‘No veremos el fin durante nuestra vida’
    Usted pudiera contestar: ‘Pero usted sí cree que Dios intervendrá algún día, ¿no es cierto?’. Entonces pudiera añadir: 1) ‘La única manera como algunos de nosotros pudiéramos saber cuándo será es si Él pusiera a nuestra disposición tal información. Pues bien, Jesús declaró francamente que ningún hombre sabe el día ni la hora, pero describió detalladamente las cosas que sucederían durante la generación en que habría de ocurrir el fin’. 2) ‘Esa descripción trata con acontecimientos que usted conoce personalmente. (Si es posible, considere detalles de la señal, utilizando los datos que se suministran en las páginas anteriores.)’.

    ‘Esas cosas no me preocupan; yo sólo vivo el presente’
    Usted pudiera contestar: ‘Es verdad que es bueno no estar demasiado preocupados por el futuro. Pero todos tratamos de hacer planes en nuestra vida para protegernos y proteger a nuestros seres amados. Es práctico hacer planes prácticos, realistas. La Biblia muestra que en el futuro habrá cosas maravillosas, y somos sabios si hacemos planes para beneficiarnos de ellas (Pro. 1:33; 2 Ped. 3:13)’.

    ‘Yo no pienso mucho en esas cosas; me gusta ser optimista en cuanto al futuro’
    Usted pudiera contestar: ‘Es interesante el hecho de que Jesús dijo que habría buenas razones para que sus seguidores fueran optimistas en nuestro día (Luc. 21:28, 31)’. Entonces pudiera añadir: ‘Pero note que él no les dice que cierren los ojos a lo que sucediera en el mundo para que fueran felices. Les dice que su optimismo estaría bien fundado; esto se debería a que entenderían el significado de los acontecimientos mundiales y sabrían cuál será el resultado final’.
    ========================

    • 10 min. “Tomen por modelo a los profetas: Jonás.” Preguntas y respuestas.

    1. ¿Qué cualidades poseía Jonás?
    1. ¿Qué nos viene a la mente cuando pensamos en el profeta Jonás? Algunos piensan que fue cobarde o insensible. Sin embargo, está claro que fue un hombre humilde, valiente y sacrificado. ¿Cómo podríamos nosotros imitar el modelo que nos dejó? (Sant. 5:10.)

    (Santiago 5:10) Hermanos, tomen por modelo de sufrir el mal y de ejercer paciencia a los profetas, que hablaron en el nombre de Jehová.

    2. ¿Cómo podemos imitar la humildad de Jonás?
    2. Humilde. Cuando Jonás recibió su asignación, salió huyendo en dirección contraria. Y no era para menos, pues los asirios tenían fama de feroces. Además, a Nínive se le llamó “la ciudad de derramamiento de sangre” (Nah. 3:1-3). Pero Jehová corrigió a Jonás y le dio una segunda oportunidad de obedecer, la cual él humildemente aprovechó (Prov. 24:32; Jon. 3:1-3). Pese a que al principio trató de librarse de su comisión, Jonás finalmente hizo la voluntad de Dios (Mat. 21:28-31). Y nosotros, ¿estamos dispuestos a seguir predicando aun cuando hayamos sido disciplinados o cuando el territorio sea difícil?

    (Nahúm 3:1-3) ¡Ay de la ciudad de derramamiento de sangre! Está toda llena de engaño [y] de robo. ¡[De allí] la presa no parte! 2 Hay el sonido de[l] látigo y el sonido del traqueteo de [la] rueda, y el caballo que arranca y el carro que salta. 3 El jinete montado, y la llama de [la] espada, y el relámpago de [la] lanza, y la multitud de los que han sido muertos, y la masa pesada de cadáveres; y de los cuerpos muertos no hay fin. Ellos siguen tropezando entre sus cuerpos muertos;
    (Proverbios 24:32) De modo que procedí a contemplar, yo mismo; empecé a poner[lo] en el corazón; vi, acepté la disciplina:
    (Jonás 3:1-3) Entonces la palabra de Jehová le ocurrió a Jonás por segunda vez, y dijo: 2 “Levántate, ve a Nínive la gran ciudad, y proclámale la proclamación que te voy a hablar”. 3 Ante aquello, Jonás se levantó y fue a Nínive según la palabra de Jehová. Ahora bien, resultaba que Nínive misma era una ciudad grande ante Dios, con distancia de tres días de camino.
    (Mateo 21:28-31) ”¿Qué les parece? Un hombre tenía dos hijos. Dirigiéndose al primero, dijo: ‘Hijo, ve, trabaja hoy en la viña’. 29 En respuesta, este dijo: ‘Iré, señor’, pero no fue. 30 Acercándose al segundo, dijo lo mismo. En respuesta, este dijo: ‘No quiero’. Después le pesó, y fue. 31 ¿Cuál de los dos hizo la voluntad de [su] padre?”. Ellos dijeron: “El segundo”. Jesús les dijo: “En verdad les digo que los recaudadores de impuestos y las rameras van delante de ustedes al reino de Dios.

    3. ¿Por qué necesitamos ser valientes y sacrificados para realizar nuestro ministerio?
    3. Valiente y sacrificado. Cuando Jonás se dio cuenta de que su mala decisión había puesto en riesgo las vidas de los marineros, estuvo dispuesto a sacrificar la suya (Jon. 1:3, 4, 12). Más tarde, mientras cumplía con su comisión en Nínive, caminó hasta el mismísimo centro de la ciudad, tal vez para buscar un lugar adecuado desde el cual proclamar el juicio de Jehová. Esas no son cosas que haría un cobarde, sino alguien muy valiente (Jon. 3:3, 4). ¿Qué lección aprendemos? Que necesitamos pedirle valor a Dios para seguir proclamando su mensaje en un ambiente hostil (Hech. 4:29, 31). Y también que debemos demostrar espíritu de sacrificio a fin de dedicar nuestro tiempo y recursos al ministerio (Hech. 20:24).

    (Jonás 1:3, 4) Y Jonás procedió a levantarse y huir a Tarsis de delante de Jehová; y finalmente bajó a Jope y halló una nave que iba a Tarsis. Por lo tanto, pagó su pasaje y bajó y entró en ella, para irse con ellos a Tarsis de delante de Jehová. 4 Y Jehová mismo arrojó un gran viento en el mar, y llegó a haber una gran tormenta en el mar; y en cuanto a la nave, estaba a punto de ser destrozada.
    (Jonás 1:12) Así que él les dijo: “Álcenme, y arrójenme al mar, y el mar se les aquietará; porque me doy cuenta de que por causa de mí está sobre ustedes esta gran tormenta”.
    (Jonás 3:3, 4) Ante aquello, Jonás se levantó y fue a Nínive según la palabra de Jehová. Ahora bien, resultaba que Nínive misma era una ciudad grande ante Dios, con distancia de tres días de camino. 4 Finalmente Jonás comenzó a entrar en la ciudad por distancia de un día de camino, y siguió proclamando y diciendo: “Solo cuarenta días más, y Nínive será derribada”.
    (Hechos 4:29) Y ahora, Jehová, da atención a sus amenazas, y concede a tus esclavos que sigan hablando tu palabra con todo denuedo,
    (Hechos 4:31) Y cuando hubieron hecho ruego, el lugar donde estaban reunidos fue sacudido; y todos sin excepción quedaron llenos del espíritu santo, y hablaban la palabra de Dios con denuedo.
    (Hechos 20:24) Sin embargo, no hago mi alma de valor alguno como preciada para mí, con tal que termine mi carrera y el ministerio que recibí del Señor Jesús, de dar testimonio cabal de las buenas nuevas de la bondad inmerecida de Dios.

    4. ¿Por qué debemos reflexionar en el buen ejemplo que dejaron los profetas?
    4. Cada vez que leamos el relato de alguno de los profetas de Dios, sería bueno tratar de ponernos en su lugar. Preguntémonos: “¿Qué habría hecho yo? ¿Cómo puedo imitar sus cualidades en mi vida?” (Heb. 6:11, 12). En futuros números de Nuestro Ministerio del Reino se analizarán las lecciones que podemos aprender de otros fieles profetas de Dios.

    (Hebreos 6:11, 12) Pero deseamos que cada uno de ustedes muestre la misma diligencia a fin de tener la plena seguridad de la esperanza hasta el fin, 12 para que no se hagan indolentes, sino que sean imitadores de los que mediante fe y paciencia heredan las promesas.

    Cántico 13
    "ACCIÓN DE GRACIAS"
    ======================================
    Estudio de la Atalaya:
    “¿Valoramos nuestra herencia espiritual?
    Cántico 22
    "JEHOVA ES MI PASTOR"

    Párrafo 2
    Amós 9:11 ”‘En aquel día levantaré la cabaña de David que está caída, y ciertamente repararé sus brechas. Y sus ruinas levantaré, y ciertamente la edificaré como en los días de mucho tiempo atrás,
    Ezequiel 21:27 Ruina, ruina, ruina la haré. En cuanto a esta también, ciertamente no llegará a ser [de nadie] hasta que venga aquel que tiene el derecho legal, y tengo que dar [esto] a él’.
    Hechos 2:29-36 ”Varones, hermanos, es permisible hablarles con franqueza de expresión respecto al cabeza de familia David, que falleció y también fue sepultado, y su tumba está entre nosotros hasta este día. 30 Por lo tanto, porque era profeta y sabía que Dios le había jurado con juramento que sentaría a uno del fruto de sus lomos sobre su trono, 31 vio de antemano y habló respecto a la resurrección del Cristo, que ni fue abandonado en el Hades ni su carne vio corrupción. 32 A este Jesús lo resucitó Dios, del cual hecho todos nosotros somos testigos. 33 Por eso, debido a que fue ensalzado a la diestra de Dios y recibió del Padre el espíritu santo prometido, él ha derramado esto que ustedes ven y oyen. 34 De hecho, David no ascendió a los cielos, sino que él mismo dice: ‘Jehová dijo a mi Señor: “Siéntate a mi diestra, 35 hasta que coloque a tus enemigos como banquillo para tus pies”’. 36 Por lo tanto, sepa con certeza toda la casa de Israel que Dios lo hizo Señor y también Cristo, a este Jesús a quien ustedes fijaron en un madero”.
    Juan 10:16 ”Y tengo otras ovejas, que no son de este redil; a esas también tengo que traer, y escucharán mi voz, y llegarán a ser un solo rebaño, un solo pastor.
    Párrafo 3
    1 Juan 5:19 Sabemos que nosotros nos originamos de Dios, pero el mundo entero yace en el [poder del] inicuo.
    Párrafo 4
    Salmo 137:1-6 Junto a los ríos de Babilonia... allí nos sentamos. También lloramos al acordarnos de Sión. 2 Sobre los álamos en medio de ella colgamos nuestras arpas. 3 Porque allí los que nos tenían cautivos nos pidieron las palabras de una canción, y los que se mofaban de nosotros... regocijo: “Cántennos una de las canciones de Sión”. 4 ¿Cómo podemos cantar la canción de Jehová sobre suelo extranjero? 5 Si te olvidara, oh Jerusalén, sea olvidadiza mi diestra. 6 Que mi lengua se pegue a mi paladar, si no me acordara de ti, si no hiciera a Jerusalén ascender por encima de mi causa principal de regocijo.
    Párrafo 6
    Deuteronomio 6:4 ”Escucha, oh Israel: Jehová nuestro Dios es un solo Jehová.
    Marcos 12:29 Jesús contestó: “El primero es: ‘Oye, oh Israel, Jehová nuestro Dios es un solo Jehová,
    Párrafo 7
    Mateo 28:19 Vayan, por lo tanto, y hagan discípulos de gente de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del espíritu santo,
    Génesis 1:2 Ahora bien, resultaba que la tierra se hallaba sin forma y desierta y había oscuridad sobre la superficie de [la] profundidad acuosa; y la fuerza activa de Dios se movía de un lado a otro sobre la superficie de las aguas.
    Párrafo 9
    Isaías 47:1 Baja y siéntate en el polvo, oh virgen hija de Babilonia. Siéntate en la tierra donde no hay trono, oh hija de los caldeos. Porque no volverás a experimentar que la gente te llame delicada y melindrosa.
    Isaías 47:12-15 Quédate quieta, ahora, con tus maleficios y con la abundancia de tus hechicerías, en los cuales te has afanado desde tu juventud; para que tal vez saques provecho, para que tal vez infundas miedo a la gente. 13 Te has fatigado con la multitud de tus consejeros. Que se pongan de pie, ahora, y te salven, los adoradores de los cielos, los contempladores de las estrellas, los que divulgan conocimiento en las lunas nuevas respecto a las cosas que vendrán sobre ti. 14 ¡Mira! Se han hecho como rastrojo. Un fuego mismo ciertamente los quemará por completo. No librarán su alma del poder de la llama. No habrá brillo de brasas para que la gente se caliente, ninguna lumbre enfrente de la cual sentarse. 15 Así ciertamente llegarán a ser para ti, [aquellos] con quienes te has afanado como encantadores tuyos desde tu juventud. Realmente irán vagando, cada uno a su propia región. No habrá quien te salve.
    Deuteronomio 18:10-12 No debería hallarse en ti nadie que haga pasar por el fuego a su hijo o a su hija, nadie que emplee adivinación, practicante de magia ni nadie que busque agüeros ni hechicero, 11 ni uno que ate a otros con maleficio ni nadie que consulte a un médium espiritista o a un pronosticador profesional de sucesos ni nadie que pregunte a los muertos. 12 Porque todo el que hace estas cosas es algo detestable a Jehová, y a causa de estas cosas detestables Jehová tu Dios va a expulsarlas de delante de ti.
    Revelación 21:8 Pero en cuanto a los cobardes y los que no tienen fe y los que son repugnantes en su suciedad, y asesinos y fornicadores y los que practican espiritismo, e idólatras y todos los mentirosos, su porción será en el lago que arde con fuego y azufre. Esto significa la muerte segunda”.
    Párrafo 10
    Revelación 18:21-24 Y un ángel fuerte alzó una piedra semejante a una gran piedra de molino y la arrojó al mar, diciendo: “Así con lanzamiento veloz será arrojada abajo Babilonia la gran ciudad, y nunca volverá a ser hallada. 22 Y el sonido de cantantes que se acompañan con el arpa, y de músicos y de flautistas y de trompeteros nunca se volverá a oír en ti, y ningún artífice de oficio alguno volverá a hallarse en ti jamás, y ningún sonido de piedra de molino volverá a oírse en ti jamás, 23 y ninguna luz de lámpara volverá a resplandecer en ti jamás, y ninguna voz de novio ni de novia volverá a oírse en ti jamás; porque tus comerciantes viajeros eran los hombres de primer rango de la tierra, pues por tu práctica espiritista todas las naciones fueron extraviadas. 24 Sí, en ella se halló la sangre de profetas y de santos y de todos los que han sido degollados en la tierra”.
    Revelación 18:1-5 Después de estas cosas vi a otro ángel que descendía del cielo, con gran autoridad; y la tierra fue alumbrada por su gloria. 2 Y él clamó con voz poderosa, y dijo: “¡Ha caído! ¡Babilonia la Grande ha caído, y ha llegado a ser lugar de habitación de demonios y escondite de toda exhalación inmunda y escondite de toda ave inmunda y odiada! 3 Porque a causa del vino de la cólera de su fornicación todas las naciones han caído [víctima], y los reyes de la tierra cometieron fornicación con ella, y los comerciantes viajeros de la tierra se enriquecieron debido al poder del lujo desvergonzado de ella”. 4 Y oí otra voz procedente del cielo decir: “Sálganse de ella, pueblo mío, si no quieren participar con ella en sus pecados, y si no quieren recibir parte de sus plagas. 5 Porque sus pecados se han amontonado hasta llegar al cielo, y Dios ha recordado sus actos de injusticia.
    Párrafo 11
    Isaías 1:13 Cesen de traer más ofrendas de grano que nada valen. El incienso... me es algo detestable. Luna nueva y sábado, el convocar una convocación... no puedo soportar el [uso de] poder mágico junto con la asamblea solemne.
    Párrafo 12
    2 Juan 1 El anciano, a la señora escogida y a sus hijos, a quienes verdaderamente amo, y no solo yo, sino también todos los que han llegado a conocer la verdad,
    Eclesiastés 9:4, 5 Pues, respecto a cualquiera que está unido a todos los vivientes, existe confianza, porque un perro vivo está en mejor situación que un león muerto. 5 Porque los vivos tienen conciencia de que morirán; pero en cuanto a los muertos, ellos no tienen conciencia de nada en absoluto, ni tienen ya más salario, porque el recuerdo de ellos se ha olvidado.
    Eclesiastés 9:10 Todo lo que tu mano halle que hacer, hazlo con tu mismo poder, porque no hay trabajo ni formación de proyectos ni conocimiento ni sabiduría en el Seol, el lugar adonde vas.
    Párrafo 14
    Job 14:13-15 ¡Oh que en el Seol me ocultaras, que me mantuvieras secreto hasta que tu cólera se volviera atrás, que me fijaras un límite de tiempo y te acordaras de mí! 14 Si un hombre físicamente capacitado muere, ¿puede volver a vivir? Todos los días de mi trabajo obligatorio esperaré, hasta que llegue mi relevo. 15 Tú llamarás, y yo mismo te responderé. Por la obra de tus manos sentirás anhelo.
    Hebreos 11:17-19 Por fe Abrahán, cuando fue probado, ofreció, por decirlo así, a Isaac, y el que gustosamente había recibido las promesas trató de ofrecer a [su hijo] unigénito, 18 aunque se le había dicho: “Lo que será llamado ‘descendencia tuya’ será mediante Isaac”. 19 Pero estimó que Dios podía levantarlo hasta de entre los muertos; y de allí lo recibió también a manera de ilustración.
    Párrafo 15
    Romanos 5:12 Por eso, así como por medio de un solo hombre el pecado entró en el mundo, y la muerte mediante el pecado, y así la muerte se extendió a todos los hombres porque todos habían pecado...
    Marcos 10:45 Porque aun el Hijo del hombre no vino para que se le ministrara, sino para ministrar y para dar su alma en rescate en cambio por muchos”.
    Romanos 3:22-24 sí, la justicia de Dios mediante la fe en Jesucristo, para todos los que tienen fe. Porque no hay distinción. 23 Porque todos han pecado y no alcanzan a la gloria de Dios, 24 y es como dádiva gratuita que por su bondad inmerecida se les está declarando justos mediante la liberación por el rescate [pagado] por Cristo Jesús.
    Párrafo 16
    Juan 3:16 ”Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que ejerce fe en él no sea destruido, sino que tenga vida eterna.
    Juan 3:36 El que ejerce fe en el Hijo tiene vida eterna; el que desobedece al Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios permanece sobre él.
    Colosenses 1:13, 14 Él nos libró de la autoridad de la oscuridad y nos transfirió al reino del Hijo de su amor, 14 por medio de quien tenemos nuestra liberación por rescate, el perdón de nuestros pecados.
    Párrafo 18
    Éxodo 12:26, 27 Y tiene que suceder que cuando sus hijos les digan: ‘¿Qué significa este servicio para ustedes?’, 27 entonces tienen que decir: ‘Es el sacrificio de la pascua a Jehová, que pasó por alto las casas de los hijos de Israel en Egipto cuando plagó a los egipcios, pero libró nuestras casas’”. Entonces el pueblo se inclinó y se postró.
    Salmo 79:13 En cuanto a nosotros tu pueblo y el rebaño de tu apacentamiento, te daremos gracias hasta tiempo indefinido; de generación en generación declararemos tu alabanza.
    Párrafo 19
    Proverbios 4:18, 19 Pero la senda de los justos es como la luz brillante que va haciéndose más y más clara hasta que el día queda firmemente establecido. 19 El camino de los inicuos es como las tinieblas; no han sabido en qué siguen tropezando.
    Salmo 71:16-18 Vendré en magnífico poderío, oh Señor Soberano Jehová; mencionaré tu justicia, la tuya sola. 17 Oh Dios, tú me has enseñado desde mi juventud en adelante, y hasta ahora sigo informando acerca de tus maravillosas obras. 18 Y aun hasta la vejez y canicie, oh Dios, no me dejes, hasta que informe acerca de tu brazo a la generación; a todos los que han de venir, acerca de tu poderío.
    Párrafo 20
    Revelación 4:11 “Digno eres tú, Jehová, nuestro Dios mismo, de recibir la gloria y la honra y el poder, porque tú creaste todas las cosas, y a causa de tu voluntad existieron y fueron creadas”.
    Isaías 61:1, 2 El espíritu del Señor Soberano Jehová está sobre mí, por razón de que Jehová me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los mansos. Me ha enviado para vendar a los quebrantados de corazón, para proclamar libertad a los [que han sido] llevados cautivos y la apertura ancha [de los ojos] aun a los prisioneros; 2 para proclamar el año de la buena voluntad de parte de Jehová, y el día de la venganza de parte de nuestro Dios; para consolar a todos los que están de duelo;
    Salmo 26:11 En cuanto a mí, andaré en mi integridad. Oh, redímeme y muéstrame favor.
    Salmo 86:12 Te elogio, oh Jehová Dios mío, con todo mi corazón, y ciertamente glorificaré tu nombre hasta tiempo indefinido,
    Cántico 75
    "LOS MOTIVOS DE NUESTRO GOZO"
    =============================
    GRACIAS = L . Y E .

    PFC777

    No hay comentarios:

    Publicar un comentario

    Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.